Todos conocemos la experiencia de mancharnos de café en el momento en que ahora nos encontramos vestidos para proceder a trabajar o aun en el trabajo. El café deja una mácula intensa y bien difícil de disimular en nuestra ropa que es bien difícil de eliminar una vez seca. De ahí que, en cuestión de máculas de café, lo destacado es accionar con velocidad para no dañar la ropa.
En la mayoría de los casos, en el momento en que has manchado una prenda con café, la primera cosa que tienes que llevar a cabo es absorber la mayor proporción de líquido viable. Para esto, emplea un papel toalla y presiónalo contra la mácula, por la parte interior y por fuera del tejido, si es requisito, pero siempre y en todo momento sin frotar, para eludir diseminar la mugre. Entonces, si tienes la posibilidad, pasa el área de la mácula bajo un chorro de agua ardiente para suavizar la mácula y aclararla lo mucho más viable. Si es una mácula pequeña, posiblemente logres disimularla sensiblemente y proseguir con tu día.
Cerveza
Tu ropa no olerá realmente bien si le viertes esta “bella” bebida, pero la cerveza puede emplearse para eliminar las máculas de café. Vierta una pequeña proporción de cerveza sobre la mácula y resfrege delicadamente con un paño limpio. La mácula debe ocultar frente tus ojos, si bien posiblemente debas reiterar el desarrollo en más de una ocasión. No hay inconveniente, te tomas otra cerveza y listo…
Para cualquier género de mácula. No obstante, tienes que llevar cuidado con la cantidad que empleas para no dañar tu ropa. Si la prenda manchada es una mezcla de algodón y la mácula es pequeña, sencillamente frota la mácula con un paño humectado con vinagre. Puedes combinar el vinagre con una medida pequeña de agua para diluir un tanto la mezcla.
Eliminar máculas de café en madera
Quizás para bastantes sea entre los antídotos mucho más extraños y espectaculares. Cuece un puñado de salvado en una cazuela con agua, cuélalo y déjalo enfriar. Con esta agua frota la mácula de café y va a desaparecer. Almacena lo que te haya sobrado pues el agua de cocción del salvado va realmente bien para recobrar la luz de maderas barnizadas y corchos.
Si la madera está encerada, pasar un algodón empapado en agua oxigenada, si es madera obscura, o en lejía, si la madera es blanca o clarísima.
Yema de huevo
Si le cuestiones a tu abuela, lo mucho más posible es que conozca este truco, puesto que era muy habitual en la temporada previo a los quitamanchas.
Y el desarrollo es muy afín a los precedentes: probablemente el paso inicial sea el más difícil puesto que hay que dividir la clara de la yema; entonces únicamente debes combinar la yema con una medida pequeña de agua y eliminar hasta conseguir una mezcla traje con la que tapar la mácula y frotar delicadamente con el apoyo de un paño o esponja. En el momento en que se haya secado, lava la plancha en la lavadora y, si bien parezca increíble, no va a quedar ni indicio de huevo ni de café.