La distancia de seguridad que debemos sostener con el vehículo de enfrente cambia en función de una sucesión de situaciones:
Agilidad: a mayor agilidad, mayor distancia a sostener con el vehículo de enfrente.
Charlemos de la distancia de seguridad
Y sucede que en el momento en que conducimos nos encaramos a una extensa variedad de ocasiones que nos fuerzan a achicar la agilidad o parar el turismo de manera inopinada, de ahí que debemos poner énfasis la distancia de retención .
Jamás entendemos si se nos puede atravesar un animal en el sendero, o si se nos puede caer un elemento del vehículo que disponemos enfrente o si hubo un incidente unos metros mucho más adelante, por consiguiente, debemos anticiparnos a eso que puede pasar, y que se solventa teniendo precaución, no distraerse manejando y sosteniendo la distancia de seguridad.
El truco del “1101”
La Dirección General de Tráfico recomienda este simple truco consistente en ver un punto fijo de la calzada y, en el momento en que pase el vehículo de enfrente, contar 1101 y 1102. Si todavía está contando antes de llegar a ese punto, quiere decir que no está sosteniendo la bastante distancia de frenado y parada y deberá achicar la agilidad para dejar mucho más espacio.
Circulando a unos 120 km/h, en el tiempo preciso para contar 1101 y 1102, tienen la posibilidad de recorrer 66 metros, que es la distancia mínima que tienen que recorrer 2 automóviles que circulen por exactamente el mismo carril. Un intervalo de 2 segundos que es un tiempo sensato para lograr reaccionar a tiempo y frenar sin ocasionar un incidente.
Exactamente en qué vías es obligación dejar la distancia de seguridad
De todos modos, la distancia de seguridad entre turismos hay que sostener en toda clase de vías. Lo explicamos ahora, aplicando la regla del cuadrado:
- En localidad
- A 20 km/h: 4 metros
- A 30 km/h: 9 metros
- A 50 km/h: 25 metros
- En la carretera
En la carretera, no chocar entre sí: respetar la distancia es clave para Viaja Seguro
Te recordamos que los adelantamientos tienen que efectuarse sin poner en riesgo a los automóviles que adelantan y sin forzarlos a cambiar su trayectoria o agilidad. Por este motivo, solo se tienen que efectuar en el momento en que se logren efectuar seguramente y siempre y en todo momento tras revisar que hay bastante distancia para efectuar la maniobra y también incorporarse sin poner en una situación comprometedora a otros individuos. Naturalmente, los automóviles asimismo tienen que hacer más simple este adelantamiento incrementando la distancia de seguridad con el vehículo que les antecede.
Hay otra forma de calcular la distancia de seguridad entre turismos. Se conoce como la regla del cuadrado, consistente en eliminar la última cifra a la agilidad a la que conduces y subir al cuadrado el número sobrante. Esencialmente, la mayor parte de los conductores son siendo conscientes de que hay que sostener una distancia segura entre los vehículos como medida de precaución. Frecuentemente nos pegamos bastante al vehículo de enfrente o observamos a alguien por el retrovisor que se aproxima bastante. Esta práctica tiene la posibilidad de tener secuelas muy graves con apariencia de incidente y, además de esto, implica una multa.